Reza el popular dicho que “con las glorias se olvidan las memorias”, pero nada más ajeno que adjudicar tal sentencia al músico pinareño Raúl Paz, que regresa a su natal San Luis para protagonizar un esperado concierto de verano este sábado.
Embajador de Buena Voluntad de la Unesco, Paz no olvida su terruño y cada vez que su agenda de trabajo le permite se da un salto hasta el occidental municipio a compartir con los suyos sus más recientes entregas musicales.
Fue aquí donde aprendió a cantar escuchando música tradicional cubana y ya
Reza el popular dicho que “con las glorias se olvidan las memorias”, pero nada más ajeno que adjudicar tal sentencia al músico pinareño Raúl Paz, que regresa a su natal San Luis para protagonizar un esperado concierto de verano este sábado.
Embajador de Buena Voluntad de la Unesco, Paz no olvida su terruño y cada vez que su agenda de trabajo le permite se da un salto hasta el occidental municipio a compartir con los suyos sus más recientes entregas musicales.
Fue aquí donde aprendió a cantar escuchando música tradicional cubana y ya desde la temprana edad de 10 años escribía canciones.
Con ocho discos grabados entre ellos Mulata, Cuba Libre, Revolución y Havanization, Paz se identifica en el panorama sonoro de la Isla por su estilo musical que combina la forma trovadoresca juvenil con los estribilleros de salsa
Sin descartar la cubanidad, sus canciones destilan aliento internacional hasta tal punto de convertirse en uno de los más auténticos representantes de la World Music Internacional.
El aún joven músico ha compartido escenario con Rosario Flores, Pasión Vega, Lolita, Luz Casal, Manu Chao, Ketama, Rubén Blades, Tito Puente y Celia Cruz.
En hora buena para San Luis, un hijo regresa a cantarle.